21 de noviembre de 2012

Empatía {Cualidad o defecto}

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Este fin de semana hablaba con una amiga sobre la empatía. Siempre había pensado que el ser capaz de ponerse en el lugar del otro era una cualidad positiva, pero esta conversación me llevó a pensar en que en ocasiones puede ser contraproducente. Depende de cómo la asumamos será una virtud o un “castigo”.


En ocasiones la empatía con los demás, se convierte en un lastre para nuestra integridad emocional. Se instaura en nosotros como si fuéramos nosotros mismos los que sentimos el dolor. De hecho, hay estudios que reflejan la relación de la empatía con la fibromialgia y la fatiga crónica, sin ser todavía determinantes. Pero si es cierto que cuando empatizas demasiado con una persona con problemas acabas sin energía.

¿Os a pasado alguna vez que algunas personas o situaciones os absorbían toda la energía?  A mi en ocasiones si me ha ocurrido, al principio me sentía con la obligación de "aguantar" y luego era capaz de descargar mi frustración y cansancio con os que más querían. Hubo un tiempo que huí de este tipo de situaciones, pero hoy por hoy forman parte de mi vida como muchas otras, y me han enseñado mucho.

Las obsesiones, los radicalismos, los extremos siempre son absorbentes y no nos permiten ver el bosque. La moderación, desde mi entender, es sin duda el mejor de los caminos. 

Tenemos que ser capaces de poner límites, seguramente en ocasiones parezcamos egoístas o crueles, pero el dejar que el otro encuentre su camino es un buen regalo. Cuando nuestra capacidad de empatizar es grande, no vamos a conseguir quitarnos de la cabeza fácilmente el problema o situación de la otra persona, y más si vivimos con ella, pero a todo se aprende y de todo se aprende. Somos más valiosos sanos, felices y con energía suficiente para ayudar cuando realmente se nos necesite.

Debemos pensar que muchas de estas personas que nos absorben la energía, son personas que necesitan público, por decirlo de algún modo, y que mejor público que el que nos escucha, nos regala dulces palabras y además nos regala energía. Debemos ser honestos y escuchar a nuestro cuerpo, este nos dirá cuando es suficiente. Ten claro que no puedes agotar tus recursos emocionales ni físicos. 

Os dejo con una frase que tengo en mi libreta apuntado y que no se de quien es, si alguno de vosotros la identifica, que me lo diga y lo corrijo.

“No he creado ningún problema a los demás y no puedo solucionarlos. Mi única esperanza es estar ahí, con mi compasión y amor”


Ser felices

Anne ♥






13 comentarios:

La Casita Turquesa dijo...

Yo procuro empatizar e intento ayudar en lo que puedo sin agobios pero un miembro de mi familia, lo lleva al extremo y "sufre" en exceso los problemas del resto. Ha sido así toda la vida y a estas alturas, es imposible que cambie. Es muy frustrante no poder aligerarle la carga.

Anónimo dijo...

YO intento empatizar siempre, creo que es agradable que la gente empatice incluso necesario para una buena relación. Pero tuve una amiga que me dejaba anulada totalmente, no tenía fuerzas ni para hablar cuando llegaba a casa, estaba agotada. Una vez puede pasar pero cuando es costumbre, es muy difícil de llevar y lo que tu dices es imposible aligerarle la carga.

Núria dijo...

Anne pues yo tengo este problema...pienso que como dices es una virtud pero chica según que personas me dejan totalmente KO y hay momentos que opto por evitar según que situaciones...y esto lo hago ahora porque me han aconsejado que es mejor para mi...he llegado a estar realmente mal tras haber estado con una de estas personas que todo es negativo, les duele todo....es un tema realmente muy complejo pero que pienso que hay momento que si realmente te afecta has de reaccionar.
feliz día preciosa

Milena dijo...

Está claro que hay poner límites, y más tal y como está el mundo...
Y creo que hay que alejarse de lo tóxico, personas incluidas: hay que discriminar.
Los amigos/gente que te rodea se eligen, no se deja uno elegir... lo ideal es que sea mutuo, pero porque alguien te persiga, no hay que dar el brazo a torcer, a la larga pasará factura...
La compasión, el amor, salen de dentro de uno, de lo profundo... y se extienden de manera natural ;-)
otra cosa son las relaciones sociales...

Luisa Morón dijo...

yo estoy totalmente de acuerdo con la Casita Turquesa, además lo sufro de cerca, a veces es imposible cambiar. Bss

Anónimo dijo...

Saber que existe un problemas es parte de su solución. Cada día será menos complejo ♥

Anónimo dijo...

Creo que actualmente hay mucha ambigüedad entre amigos y conocidos. No me lo había planteado como "tóxico" pero es muy cierto, tenemos que cuidarnos y saber elegir. Mucho amor amiga

Anónimo dijo...

Hay que intentarlo una y otra vez, pero no es fácil, eso lo sé. Un besote

flori zubiaga dijo...

¡Buenas noches Ana!
He leído antes esta estrada, y me he quedado pensando sobre ello.
Ahora vengo a compartir contigo mi reflexión: Muchas veces empatizamos tanto con otras personas, que hacemos nuestro el problema que les afecta. Pero cada cual tiene que aprender sus lecciones, atravesar su dolor para poder crecer, si lo vemos con perspectiva y distancia es como dejar que camine solo un niño, se caerá, pero es el paso necesario para fortalecer su seguridad. Muchas veces la queja y el lamento que alguien trata de descargar es un reflejo de su debilidad y su miedo. Cuando vivió la ocasión de aprender a enfrentarse a los problemas, alguien salto el charco por él o lo esquivó haciendo trampa.
Creo que cuando mas útil es empatizar es en nuestros conflictos con los demás, cercanos o lejanos.
Es muy diferente reprochar a alguien, que decirle que entiendes su situación...
Un beso.
Flori

Anónimo dijo...

No hablo de reproche hablo de desgaste mental, hay personas que les gusta hacer sus problemas de los demás,no se trata de solucinárselo, sólo de estar ahí escuchando y sintiendo. En ocasiones este sentimiento te acapara y no te deja escapar, sin ser realmente tuyo. La empatía es la capacidad de ponerte en el puesto del otro, ser su espejo. El reproche es echar en cara algo. Un besote

flori zubiaga dijo...

No me refería PARA NADA a tu texto con lo del reproche, si no a la manera más común que tenemos algunas personas de enfrentar los conflictos. La empatía no abunda demasiado en esta sociedad llena de prisas. Pocas veces nos paramos a pensar en los motivos del otro para hacer lo que hace, juzgarlo a la ligera es más rápido.

Ayer me olvidé de dejarte los títulos de los libros que me acompañan, y que como alguien dijo:
"Leer no es una posibilidad, sino una necesidad si uno quiere crecer. Otros se han enfrentado a los mismos problemas que tú y han dejado sus enseñanzas por escrito"

1º CUANDO SEA FELIZ Mónica Esgueva
(Paso de ser un libro más a ser "Mi libro", me abrió la mente, los ojos y el alma. Si por alguna razón estoy triste, abro al azar por una pagina y siempre descubro algo nuevo y reconfortante. Para mi gusto aúna en uno a 100 libros y va desde la filosofía hasta el poder de la meditación. Creo que las cosas pasan por causalidad y que éste libro llegó a mi vida cuando tenía que llegar... pero ojalá hubiera llegado antes.
2º TUS ZONAS ERRONEAS Wayne Dayer
(Sobre los "pesos" que a veces cargamos a nuestras espaldas como consecuencia de la educación recibida: obligaciones, compromisos, deberes. Tiene algún audio en YOU TUBE con el titulo de "Tus Zonas erroneas")
3ª EL HOMBRE EN BUSCA DEL SENTIDO de Viktor Frankl (Creo que con solo leerlo algo cambia dentro de ti).
Hay algunos más pero de menor calado al menos para mi: "Gente Tóxica" de Bernardo Stamateas, "Vivir si miedos" de Sergio Fernandez ...

Como me he enrollado...
Besos.
Flori.
P.D. Cuando veo mis calabazas, me acuerdo que comentaste que se te habían estropeado. Que pena estar tan lejos si no un día de estos me veías aparecer con una de mis megacalabazas en el maletero.

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo, a veces no sabemos como solucionar nuestros conflictos y estallamos de un modo poco apropiado, los reproches incluidos.
Gracias por los libros ya lo he puntado, alguno me sonaba pero no lo he leído ninguno, ya te iré contando.
Si algún día pasas por aquí, con calabaza o sin ella, no te olvides de mi :) un millón de gracias por acordarte de los títulos y por tus reflexiones ♥

lamohino dijo...

Qué gran manera de introducir este tema guapa, porque creo que la empatía a veces está mal entendida. Porque pareciera que ser empático es estar comprendiendo todos los problemas de los demás hasta el punto de ser él y si no lo haces es que eres poco comprensivo. Y como bien he leído despues en uno de tus comentarios se trata más bien de ser el acompañante, el espejo, y propocionarle todo el amor para que siga su camino. Escucha, atención, toda dedicación. Una actitud pasiva ante otro.
Esta sociedad además nos encauza a solucionar los problemas sin darle la importancia que se merece a la responsabilidad personal y pareciera entonces que cuando vemos a un amigo con problemas debiéramos "solucionarle" la vida o huir, extremos ambos, cuando el mejor apoyo sería acompañarle en su propia búsqueda.
Yo soy de esas personas que sensibiliza sin quererlo, tengo esa sensibilidad, pero a veces mal llevada me ha dado lugar a muchos momentos en el que se han visto mermadas mis energías, y que a veces de mucho emplearla sufrimos el Síndrome del quemado o Síndrome del burn out. Como en todo, con el paso del tiempo vas aprendiendo. Incluso con el tiempo aprendes que quizá poner mucho empeño en hacer el camino del otro venía quizá motivada por evitar la ansiedad del propio camino. Aprendes que la empatía es la actitud de estar completamente disponible para otra persona, omitiendo los propios pensamientos, preocupaciones y opiniones para desarrollar mejor la escucha y atención. Y como toda actitud requiere entrenamiento, mucho. Y a veces, uno puede comprender el sentimiento ajeno pero no tener una buena actitud para ayudarle sabiendo acompañar, apoyar, dar amor.
Cuando nos alejamos yo lo veo como cierta huida porque hay algo propio no resuelto, excesiva exigencia personal, miedo a no saber solucionar ese problema..., no obstante, hay casos que si no aporta nada, es bueno alejarse, diciendolo a la persona, y siendo sinceros con uno mismo.
Y no estar mal por alejarnos, pues es solo que quizá no es el momento de estar preparados para encararlo y decidimos libremente alejarnos y por tanto aceptar las consecuencias de esa decisión.

Y una persona puede ser sensible y comprensiva hacia el sentimiento ajeno pero otra cosa es ser empático. Y si nos sentimos cansados sin energías
Los dos últimos libros que te han recomendado: "Tus zonas erróneas" y "El hombre en busca del sentido" son muy buenos.
Me ha encantado esa reflexión guapa. Porque creo que como muchos otros conceptos está a veces mal comprendida.

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